Sobre el hoy denominado Instituto de Educación Especial “Padre Leyh”, señala la página Web de la Asociación Civil “Hacienda La Trinidad” que esta institución fue creada con el nombre de “Refugio para varones pobres y abandonados” en Gaceta Oficial del 12 de abril de 1924, (1) procediéndose hasta 1955 a la construcción y ampliación periódica de sus instalaciones al pie de la casona de la hacienda “La Trinidad". Dicha hacienda, que había sido otorgada a José Antonio Páez en retribución a sus servicios a la Nación y vendida sucesivamente, fue expropiada al general Cipriano Castro durante la década de 1910, pasando a ser después propiedad de Juan Vicente Gómez hasta el fallecimiento de éste en 1935. La idea de este refugio tomó cuerpo luego de que no se concretara allí la creación del Colegio Federal de Agricultura que había sugerido el científico Henri Pittier al general Gómez, para entonces Presidente de la República. Confiada la propiedad en 1924 a la orden benedictina de Saint Otilien, en calidad de comodato, se creó el refugio, el cual se transformó más tarde (1945) en escuela-granja y tomó el nombre de Colegio “Padre Antonio Leyh” en honor a su primer director. La referida orden administró la sede del colegio hasta 1972, fecha en que fue entregado al Ministerio de Sanidad [hoy Ministerio del Poder Popular para la Salud] (su organismo de adscripción desde 1945), luego de vencerse el contrato de comodato y no ser éste renovado por el Estado. En la actualidad, la institución funciona en una parte de estas instalaciones, específicamente en el primer patio, como Instituto de Educación Especial Padre Leyh, [creado como Psicopedagógico Padre Leyh (IPC 2006) en 1973 (Carta al Presidente 2007)], y hoy día dependiente de CORPOSALUD.
Dos vistas del conjunto arquitectónico del hoy Instituto de Educación Especial Padre Leyh. La foto superior, obra de J.M. Gómez Durán (1965) es de frecuente presencia en este blog. La segunda, correspondiente a la década de 1970, fue colocada en facebook por César Rodríguez. Ambas fotografías documentan la magnificencia de este conjunto arquitectónico que hoy día inexplicablemente muere de mengua.
Hacia 2006, el segundo patio fue objeto de intervención por parte de CORPOSALUD Aragua, para ubicar allí dependencias administrativas de dicho organismo.
Vista de la Casona de La Trinidad, ya en estado ruinoso, desde el segundo patio del conjunto arquitectónico que conformaba el Colegio Padre Antonio Leyh. (Foto Asociación Civil Hacienda La Trinidad, 2006).
Según puede inferirse de la observación de las fotografías disponibles de la Casona (antiguas y actuales), buena parte de sus instalaciones anexas ya habrían existido al menos desde la época en que Páez era su dueño. En el transcurso de los años en los que la orden benedictina detentó la propiedad en calidad de comodato, las instalaciones del período paecista habrían sido modificadas de manera irreversible, o más propiamente sustituidas por estructuras realizadas con un estilo nuevo y con técnicas y materiales constructivos más actualizados (hierro, granito, asbesto, concreto armado y bloque). En torno a dos patios fueron alzándose construcciones de hasta de tres pisos, con corredores externos en la planta baja y con acceso a los pisos superiores a través de escaleras, e incluso mediante un ascensor.(2) El resultado fue un vasto conjunto arquitectónico que disponía de cocina, comedor y almacén de alimentos,(3) aulas de clases, talleres, dormitorios, capilla, auditorio, y un gran tanque a cielo abierto que almacenaba el agua necesaria para todas las actividades internas de la institución.(4) En los alrededores del conjunto, una piscina, un campo de fútbol y un extenso huerto (5) con frutales y hortalizas ocupaban el tiempo de ocio de monjes y alumnos, y a veces también el de castigo.(6)
Vistas diversas de las instalaciones de la antigua Hacienda La Trinidad, en el estado en que posiblemente las habría recibido, en calidad de comodato, la orden benedictina de Saint Otilien. (Fotos: El Cojo Ilustrado 1898 y Orden benedictina de Saint Otilien. Fuente: Asociación Civil "Hacienda La Trinidad").
Esta interesante imagen muestra el contraste inicial entre las antiguas instalaciones de estilo colonial (derecha) y las nuevas -realizadas en estilos, materiales y técnicas constructivas más actualizadas-, que habrían de sustituirlas (izquierda). (Foto Orden benedictina de Saint Otilien. Fuente: Asociación Civil "Hacienda La Trinidad").
Transformación en el tiempo del primer patio. (Fotos: Orden benedictina de Saint Otilien e IPC2006, respectivamente).
Transformación en el tiempo de la entrada sur al conjunto arquitectónico que conformaba el Colegio Padre Antonio Leyh. (Fotos: Orden benedictina de Saint Otilien y Asociación Civil "Hacienda La Trinidad", respectivamente).
Imagen del ya desaparecido tanque a cielo abierto en el patio central del antiguo Refugio para varones pobres y abandonados. Este tanque fue sustituido por otros tres construidos posteriormente sobre la colina La Trinidad (Foto: Orden benedictina de Saint Otilien. Fuente: Asociación Civil "Hacienda La Trinidad").
Busto del padre Antonio Leyh, colocado en un jardín lateral del primer patio, hacia el cual comunica la cocina (Foto: Asociación Civil "Hacienda La Trinidad", 2006).
Reporta IPC (2006, p. 53) que hacia el lado este del segundo patio se conserva una “edificación con paredes de adobes cocidos y tapia, cuya cubierta original de madera y tejas fue sustituida por un techo de láminas de asbesto. Se presume que esta construcción fue usada como sitio de almacén del antiguo patio de faenas de la hacienda y dedicada por los benedictinos a la lavandería del colegio”.
Vista general de las instalaciones al sur de la Casona de La Trinidad, probablemente de la época paecista, una minúscula parte de las cuales parece haber sobrevivido al tiempo y a la intervención benedictina. (Foto: El Cojo Ilustrado, 1898. Fuente: Asociación Civil "Hacienda La Trinidad").
La tapia (7)
El portal de la Asociación Civil “Hacienda La Trinidad” informa asimismo acerca de que “al sureste de la casona de la antigua hacienda puede aún apreciarse los muros de tierra apisonada [y mampostería (tapia con rafas)], en las que puede observarse con claridad tres etapas de construcción vertical. Esta estructura bordeaba el patio de secado del café y el cacao que se cultivaron exitosamente en la hacienda, y donde más tarde se ubicaron las vaqueras luego de que el General José Antonio Páez introdujera…. la explotación pecuaria. Estos muros se conservan casi intactos en sus flancos sur y este”.
Imágenes del sector sur de la tapia que bordea lo que fuera el patio de secado y luego la vaquera de la antigua Hacienda La Trinidad (Fotos Asociación Civil "Hacienda La Trinidad").
NOTAS:
(1) “….había muchachos de todas partes de Venezuela, ya que este colegio fue el primer internado para varones que hubo en el país” (F. Sucre y C. Guerrero. Arvelo 2003, p. 191).
(2) Cuenta Francisco Sucre: “….después que yo llegué al colegio [1926], siguieron construyendo cada vez más edificaciones: los dormitorios, los baños, las aulas de clase… la cocina… bien espaciosa, y el comedor que era bien grandote, con mesas que yo me acuerde, para sentar a veinte muchachos cada una, con sus bancos. Después hicieron la Capilla, en el medio, entre la Casona allá arribota y el comedor acá abajo… bien grande y bonita. ¿Sabes?, los hermanos pusieron un ascensor para subir desde el comedor y los talleres, pasando por los tres pisos de la edificación construida por ellos hasta la Casona en el cerrito, para no estar agarrando tanta escalera…. Cuando se hizo la piscina grande atrás del comedor, el ascensor se usaba mucho más que las escaleras. También había un ascensorcito como una cajita que servía para subir la comida desde la cocina hasta la Casona o la capilla, y cuando terminaban allá arriba, traer de vuelta la vajilla sucia a la cocina. Bien cómoda la cosa pues, sobre todo cuando los hermanos fueron envejeciendo y ya no podían estar con tanta subidera y bajadera para venir al comedor” (F. Sucre y C. Guerrero. op. cit, pp.197-198).
(3) “Toda esta área fue clausurada y declarada inhabitable en el año 2003 por presentar fuertes hundimientos y desplazamiento de las losas del piso, y profundas grietas en las paredes, columnas y platabanda del techo de la cocina” (IPC 2006, p.56).
(4) “Aprovecho el paréntesis y pregunto:… ‘y de dónde sacaban el agua para el colegio?’. Responde Cerveleón:… ‘bueno, había un pozo con su bomba que llenaba un tanque que queda detrás de la Casona de la hacienda, que todavía está en el alto de la colina’... Interrumpe Sucre: ‘ya va, que eso fue después. Me acuerdo que, cuando yo era muchacho, nosotros nos surtíamos de agua por un camino de agua que venía a mitad de la falda de la montaña desde lejos y pasaba por el lado de debajo de la Casona de la hacienda, donde dormían los hermanos, que quedaba en el alto. Ese camino era una acequia y cuando ya no había montaña… el camino del agua iba por encima de unos arcos cada vez más chiquitos, que terminaban en el centro del patio central del colegio, en un tanque grande hundido en el piso, que además lo usamos después, cuando hicieron el pozo, como piscina… después de muchos años fue que hicieron el pozo ése que dice Cerveleón e hicieron la piscina grandota’” (F. Sucre y C. Guerrero. op. cit., p. 197).
(5) “[El general Gómez] venía todas las tardes en su Lincoln negro grandote, como a las cuatro de la tarde, a buscar a Juanchito su hijo, que estudiaba con nosotros. Le ponían una silla en medio del patio para que se sentara a tomarse un enorme vaso de jugo de naranja California, de las matas que teníamos sembradas por todo eso, desde después del campo de fútbol hasta donde hoy está Identificación [hoy día Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería-SAIME] y hasta allá, cerca del cerro donde están los arcos” (Idem, p. 195).
(6) “Los castigos eran quedarse el fin de semana limpiando, barriendo, lavando, pintando o sembrando matas, y que yo sepa, eso era bien bueno porque así los malcriados muchachos aprendían para arreglar y mantener en el futuro sus casas” (Ibidem, p. 199).
(7) La tapia se caracteriza por muros de gran espesor (50 a 90 cm.) cuyo método de fabricación consistía en apisonar una mezcla de tierra, arena, gravilla fina, piedras y arcilla, capa por capa, dentro de un molde conformado por dos tablones de madera de 0.60 m . de alto y 3 m . de largo, mantenidos en posición vertical por travesaños también de madera. La tapia con rafa es una variante de la tapia, y se usa sobretodo en los muros más largos y altos. Las rafas son unas estructuras en forma de sierra, de mampostería mixta con tierra, ladrillo y piedras (IPC 2004, p.54). Dichas estructuras, que se levantan de manera intercalada y regularmente en toda la extensión del muro, favorecen la estabilidad de la tapia como un todo.
FUENTES:
Arvelo, Elías. (2003). Cuentos de un pueblo… para su pueblo. El Limón: Asociación Civil Hacienda La Trinidad.
Carta al Presidente Chávez. (2007, Febrero 21). En Ideas para el cambio. [Página Web en línea]. Disponible: http://chileven.blogspot.com/2007_02_19_archive.html. [Consulta: 2011, junio 25].
Instituto del Patrimonio Cultural-IPC. (2004). " Ejemplos y descripción de técnicas constructivas tradicionales" (Anexo N° 4). En: I Censo del Patrimonio Cultural Venezolano. Instructivo de llenado de la ficha de registro . Caracas: Autor.
Instituto del Patrimonio Cultural-IPC. (2006). Catálogo del Patrimonio Cultural Venezolano: Región Centro Oriente: Estado Aragua: Municipios Mario Briceño Iragorry y Ocumare de la Costa de Oro: AR 08-18. Caracas: Autor.
Como simpre me sucede leyendo este blog, me parece muy intersante todo lo que escribes y recoges como testimonio y, al mismo tiempo, siempre siento pena de que cosas como este blog, son la única forma de "recobrar esta ciudad".
ResponderEliminarAbrazos
Pedro Hernández dice...
ResponderEliminarPues sí Claudia. La verdad es que me gustaría que la lectura de entradas como éstas dejaran un sabor más dulce que amargo (como tú -y en términos culinarios, que viene al caso- alguna vez me reclamó otra amiga cuando le serví un café sin suficiente azúcar: "¡para amarguras, las de la vida!"), pero creo que es importante mantener un tono más bien "cerrero" cuando se habla de estos casos de inexplicable -e imperdonable- negligencia hacia nuestro patrimonio cultural. Guardo sinembargo la esperanza de que, más temprano que tarde, esta situación de desprecio a nuestros valores culturales habrá de cambiar para bien y mejor.
Como ex alumno de este maravilloso colegio, siento pena ajena, por la desidia e ineficiencia de quienes ayer y hoy han detentado el poder. Los de ayer, lo dejaron morir y no renovaron el comodato, pues la educación impartida por los benedictinos o capuchinos era insuperable por los "educadores" clientelares de la adecorragia rommuliana y copeyana. Además su espíritu comunistoide y socialistoide no permitía que unos curas superaran a los insignes democratas. Pero ninguno de ellos fue mejor o al menos, estuvo a la altura de un Padre Luis, de un Padre Pascual o de un hermano Agustin o Hermano Clino. Y sesenta años después, aún se ven los resultados. Y los de ahora, ni se diga, la mediocridad rampante que vive el país en todas sus áreas, es la muestra fehaciente de la carencias morales, culturales y sociales de la caterva de mediocres que detentean el poder. A quien se le podría ocurrir salvar al Colegio La Trinidad... a las actuales autoridades municipales y regionales, es mucho camisón pa' Petra y esa no es su onda. Amanecerá y veremos, algun día todo esto cambiará y se rescatará el alma profunda del venezolano.
ResponderEliminarPedro Hernández dice:
ResponderEliminar¿Qué puedo aportar a tu comentario, estimado José Ángel, que no sea unirme de corazón a tu esperanza, que es también la mía? En el caso del complejo de La Trinidad, espero que cuando cambie esa actitud de desprecio de las autoridades hacia nuestros bienes culturales, no sea ya demasiado tarde.
Pedro Hernández dice:
ResponderEliminarA propósito, José Ángel, como antiguo alumno del Colegio, debes tener un montón cosas para decir sobre el mismo: su director y sus profesores, los métodos de enseñanza, los alumnos, la vida cotidiana en la institución, las diversas dependencias del colegio... ¿Por qué no te animas y nos cuentas sobre estas cosas desde tu perspectiva?... Aquí o en un blog tuyo. Eres testigo de primera mano y eso es algo muy valioso: tu testimonio y tus comentarios automáticamente adquieren carácter documental, como los de Cerveleón y Sucre...
buenas jose angel . mi padre fue alumno de ese colegio aproximadamente en 1943. su nombre es regulo villalta. cualquier comentario comunicate conmigo al correo ivorivonne@gmail.com. gracias
ResponderEliminaryo fui uno de los primeros diez semi-internados de Maracay que estudiamos en el Colegio Padre Antonio Leyh, empece en el año 1968 1 Er grado hasta 6 to. grado, muy buena educación Integral,teníamos talleres de metal, madera, dibujo, deporte fútbol,béisbol, piscina, clases de agricultura el maestro Pineda,zootecnia las clase nos las impartía un estudiante de la UCV, teníamos servicio de odontología el padre Angélico era el asistente, cono-si a Cerveleón el jefe de cocina buena comida y tortas ayudaba a repartir el almuerzo, el padre Oswaldo nos guiaba y cuidaba en el patio,piscina, comedor, colegios como Padre Antonio Leyh la Trinidad hacen falta en Aragua y en todos los estados de Venezuela. ex alumno Franklin Castro vivo en el limón, el Pase
ResponderEliminarFran_klincastro@hotmail.com. ex-alumno del colegio
EliminarIvonne y Franklin, al igual que Josè Angel, ustedes son testigos de ex cepciòn y por tanto sus comentarios adquieren caracter testimonial de primera mano. Por què no se animan a contar por esta vìa (o mediante un blog propio) sus experiencias y recuerdos sobre esta significativa instituciòn. Estos escritos aportarìan una interesante informaciòn sobre aspectos cotidianos de su funcionamiento, sin duda de gran ayuda para los estudiosos de estos temas. En todo caso, gracias por sus comentarios!
ResponderEliminarFran_klincastro@hotmail.com. ex-alumno del colegio
EliminarMi nombre Pastor Rodriguez, estudié en el Internado Padre Antonio Leyh del 53 al 58. Me interesa compartir vivencias ...estaré en contacto con Udes...hasta pronto
ResponderEliminarLo dicho, estimado Pastor: ustedes, los que tuvieron de una u otra manera contacto con dicha institución, son testigos de primera línea, y la relación de sus vivencias representa un documento de primera mano. Mi sugerencia es la misma que he hecho a Ivonne y a Franklin. Si le resulta más cómodo, puede utilizar el correo vinculado a este blog (laciudadrecobrada@hotmail.com). ¡Gracias por su amable participación!
ResponderEliminarhola
ResponderEliminarHola soy ex alumno estudié allí desde el 57 al 63.
ResponderEliminarDisculpas a los lectores, es 1ra vez que estoy en estoy y pruebo con cada escribo, ayer escribo cosas y no salieron publicadas. seguiremos intentando.
ResponderEliminarParece que está saliendo, si alguien me ayuda mejor, sigo a ver que tal. Como escribí al inicio soy ex alumno salí de 6to. grado en 1963, ingresé en 1957 y repetí 1er grado, me rasparon porque no sabía leer y tengo el bolentín, el cual anexaré cuando sepa como hacerlo de manera sencilla.
ResponderEliminarSigo, entiendo que esto es un blog, una cosa donde se escribe tal y etc. etc. Ok, al grano de esta motivación. Iré escribiendo lo que va llegando a la mente. Los logros académicos y probablemente de la vida casi seguro se lo debo a la pasantía por dicho, colegio, lo religioso respeto, capacitación moral, responsabilidad, lastima que no me enseñaron alemán y a tocar instrumentos musicales. Maestro si no fallo y quedan a objeto de corrección con otros condiscípulos. 1er grado HERMANO AGUSTIN, 2do. no me acuerdo, 3er. MAESTRO OCHOA, fumaba de ojos saltones y aun recuerdo que cuando narró la muerte de El Libertador se le salieron las lágrimas , 4to entre el Padre Vicente (francés) y otro padre español no se su nombre, 5to BACHILLER CESPEDES, su hijo Tomasito estuvo hasta 6to grado salimos juntos y los únicos que pasamos con 17, QUE NIVEL ! 6to. PADRE PASCUAL.
ResponderEliminarArriba lei a JOSE ANGEL UZCATEGUI APONTE, con él tuve contacto hace poco por estas vías, tenia cancer y como uno revisa face book, tengo entendido que falleció. Q.E.P.D.
ResponderEliminarEscribo según me llegue cosa. en 1er. nos daban cuadernos usados de otros grados los repasabamos, estimo que era para soltar la mano. En 1er grado me metieron al calabozo porque le hice la PUÑETA A FREDY MORENO, de él tengo una foto fuimos amigos hasta que salimos de 6to grado, En el calabozo uno dormia en el suelo y la almohada era el plato donde le llevaba la comida, solo pasé una noche, A VAINA PA MALA, cada vez que intento hacer una PUÑETA la mano derecha se me devuelve sola por esa noche de calabozo, el calabozo estaba ubicado al fondo de un dormitorio, por cierto eran dos calabozos, tal vez 4 metros de altura puertas de hierro y candado muy grueso, es mi recuerdo infantil. Dicho dormitorio estaba según entiendo en lo que ahora llaman del patio interior.
ResponderEliminarpor ahora mi correo: antonioleyh2004@yahoo.es Que tal ojalá leo esto alguien interesado y podamos escribir mas cosas. Seguiré escribiendo en la medida de mi entusiasmo y tiempo. En el examen final de 1er. grado recuerdo que fue realizado por una maestra ajena al colegio.
ResponderEliminarCuando llegué al colegio recuerdo oir sonido de metales parecia un taller, cuando entré al sitio era el comedor y esa noche o mi 1ra noche allí, una vez acostados escuchaba lloros entonces en solidaridad tambien lloré y mas nunca,
ResponderEliminar¡Hola, Hugo! ¡Qué buena tu participación! Lo que nos cuentas tiene gran valor, pues así podemos conocer acerca del funcionamiento diario del colegio, su método de trabajo y enseñanza, anécdotas y toda clase de información aportada por ustedes, testigos directos, que sin duda enriquecerán la historia del colegio. Si te parece cómodo puedes ir escribiendo tal cual lo has hecho hasta ahora, según, como dices tú, tu entusiasmo (y espero que no lo pierdas) y tu tiempo. Te escribo a tu correo para proponerte otro modo de hacerlo, a ver si te parece más fácil. ¡Saludos!
ResponderEliminarFfffff
ResponderEliminarHola,,, que recuerdos aquellos, fui alumno desde 1964 hasta el 1970, mi nombre MIGUELANGEL. MEDRANO, mi telef 0414 4714979, puedo contarles como era el dia a dia desde 4 y md q nos paraban hasta 8 y md q nos acostaban....el padre pascual el hermano evangelico como flotaba en la piscina el hermano gotaldo el d almacen de la ropa que era un uniforme de pantalon corto y camisa manga corta de kaki y apargatas,,,,ah y de interior usabamos boxer de tela d camisa jajaja,,,,, el padre felipe que le silbaba durisimo al oido cuando alguien c quedaba dormido en la clase de religion,,,,,,,al padre guido cuando nos daba aquella planchita durisima en la mano con un palo d escoba q c la sacaba del bolsillo de la sotana jajaja q momentos aquellos,,,,,yo era de la 1ra mi hermano de la 2da era mayor q yo,,,, y los d la 3ra y 4ta eran los q tenian hasta los 15 años......una educacion de 1ra ahi aprendi aritmetica para toda la vida.....aprendi a sembrar con el maestro pineda,,,,,llamenme y les contare. O nos ponemos de acuerdo para agrandar estos bellos recuerdos,,,,,,,entre de 4 años,,,,por excepcion,,,,,,,nos llevaban al cerro q c llamaba la peña,,,,, el cura oswaldo era el candela era d 2 mts y cuadrado......
ResponderEliminarHola, Miguel Ángel. ¡Gracias por tu valiosa participación y por esa información tan buena que nos das! Te extiendo la invitación de escribir tus recuerdos a través de este blog. Siempre he pensado que vale más la pena publicarlos como entrada que como comentarios. Lo que podemos hacer es que te sientes a escribir tal como lo has hecho en tu comentario, sin preocuparte por formalidades, ortografía o redacción, que en todo caso yo me encargo de eso para hacer luego la publicación en una (o varias) entrada(s) de este blog. Si tuvieras también fotos de esos años o del colegio podrían ser publicadas también para ilustrar tus escritos. Mi correo es laciudadrecobrada@hotmail.com y si te parece bien, puedes enviarme allí tus textos y fotos. ¡Ojalá te entusiasmes y podamos publicar pronto por aquí tus valiosos recuerdos!
ResponderEliminarComo ex alumno, tengo recuerdos muy gratos del "Colegio La Trinidad". Recuerdo que la parte alta, donde está la iglesia, había una placa que rememoraba el paso por allí de los alemanes, que guiados por el Capitán Agustín Codazzi se dirigían a El Junquito, donde fueron instalados en terrenos del Conde Domingo de Tovar, que los donó para tal fin. (La Colonia Tovar) No recuerdo que el equipo de fútbol perdiera ningún partido, cuando salíamos a jugar con otros colegios en Maracay. Debemos recordar también, que allí se perdió la Primera República, cuando el Generalísimo Francisco de Miranda, firmó la capitulación frente a Monteverde en 1812. Para ese momento, la hacienda la Trinidad pertenecía al Conde Francisco de Las Casas. Escribo este episodio en dos de mis libros: "Mi lucha estéril sobre el Lago de Valencia" y en "Relatos históricos controvertidos", publicado en Bogotá, Colombia, por intermedio de www.autoreseditores.com (Autopublicación) ¡Corial saludo desde Valencia, estado Carabobo..!
ResponderEliminarAmigos, tuve un "lapsus brutis" cuando les indiqué que la Hacienda la Trinidad, pertenecía en tiempo de la capitulación de Miranda al Conde de las Casas. ¡El almanaque no perdona..! Era en realidad, el marqués de Casa León; al que le expropiaron la hacienda después de la victoria patriota en la famosa "Batalla de Carabobo". El marqués de Casa León, no pudo ser apresado y huyo a Puerto Rico, vía Curazao. Luego le fue entregada al gral josé Antonio Páez, como retribución en la causa patriota por la lucha de la independencia. ¡Feliz día..!
ResponderEliminarAmigo Tortoza Buenos dias desde Barquisimeto Capital Musical de Venezuela, mi nombre de pila es Pastor, apellido Rodriguez- En el colefio La Trinidad yo figuraba como Enrique Rodriguez, algunos compañeros me decían Cabezón, sobrenombre con el que bautizó mi gran amigo RAFAEL iGNACIO NARANJO cuando llegué al colegio. Si lees este mensaje, me gustaría conversar contigo sobre nuestras vivencias en La Trinidad. Yo conoci alli a un compañero de apellido Tortoza, no se si eres tú. Esbribeme por WhatsApp. este es mi numero +34 624 00 63 57...Saludos .
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